"Navegantes: Inspirado en The Tall Ships Races en aguas escandinavas"

Título: “Valparaíso”

Técnica: Acrílico y óleo sobre lienzo

Dimensiones: 90 x 90 cms

"Valparaíso", un lienzo nacido del pincel en el año 2012, emerge como una joya imprescindible en el caleidoscopio de esta exhibición.

Su gestación tuvo lugar en el marco de la magistral convocatoria "Hemisferio Sur", un evento de la más alta distinción, gestado en colaboración con la venerada Embajada de Chile y el maestro pintor Ricardo Silva Cordero. El escenario: el elegante escenario del Hotel Intercontinental, en el bullicioso corazón de la Ciudad de Guatemala.

Mis raíces se hunden en la tierra de Chile, en la bendita cuna de Viña del Mar. Allí, entre las arenas doradas y el susurro del Pacífico, se tejieron los primeros capítulos de mi existencia. Pero fue en Valparaíso, en su abrazo de colores y cerros, donde encontré el verdadero pulso de la vida.

Oh, Valparaíso querido, no eres solo un recuerdo, sino un compendio de mi propia esencia. Rememoro con dulzura los días de mi infancia, entre las paredes misteriosas de la casa de mi abuela materna, los paseos al puerto que aún resuenan en mi memoria, los cerros que desafían al cielo con sus viviendas pintadas de arcoíris, las huellas ancestrales de los tranvías en las calles, y los ascensores de colores, guardianes incansables que conducen a los corazones de la ciudad.

En esta obra, no busco más que plasmar los torrentes de emoción que aguardan en las profundidades de mi ser por esta urbe encantada. Desde la cúspide de un cerro, el lienzo captura la sinfonía del mar y las serpenteantes escaleras que lo abrazan, una invitación eterna hacia lo sublime. Sus trazos rebosan de vida y color, con contrastes vibrantes y líneas que narran historias ancestrales. Más que una mera pintura, es un tributo, un homenaje ferviente a la esencia misma de Valparaíso.

Puedes ver mi trayectoria como artista en el siguiente enlace:

https://www.jimenavarro.com/trayectoria

Un poco de historia:

La fecha exacta de fundación de Valparaíso, Chile, permanece envuelta en el misterio del tiempo, aunque se presume que ocurrió en torno al año 1559, cuando los conquistadores españoles erigieron la icónica iglesia La Matriz. Sin embargo, su verdadero esplendor se manifestó en los albores del siglo XIX, cuando la ciudad se erigió como una parada esencial para los navíos provenientes del Atlántico que surcaban el temible Cabo de Hornos, propiciando así un floreciente comercio internacional.

El auge económico atrajo oleadas de inmigrantes europeos, principalmente ingleses, alemanes y franceses, quienes vieron en Valparaíso la promesa de oportunidades comerciales y un nuevo hogar. Este crisol cultural quedó plasmado en la arquitectura de la ciudad, con edificaciones que reflejaban los estilos predominantes en la Europa de mediados del siglo XIX y principios del XX. Entre las joyas arquitectónicas destacan el imponente edificio de la Intendencia en la plaza Sotomayor (hoy sede de la Comandancia en Jefe de la Armada), la pintoresca Iglesia Anglicana Saint Paul en el cerro Concepción, el majestuoso Palacio Ross, hogar del Club Alemán, y el espléndido Palacio Lyon, convertido en el Museo de Historia Natural. Asimismo, la imponente presencia de la Iglesia y Convento San Francisco, de estilo neobarroco, corona el paisaje del cerro Barón.

En la actualidad, Valparaíso se erige como un destino imprescindible en el panorama sudamericano.